¿Cómo participamos los hombres en la igualdad de género?
Las reacciones de los hombres ante los cambios sociales de las mujeres y la exigencia de sus derechos es diversa. Hay quienes acompañan el movimiento feminista y cuestionan los estereotipos tóxicos de la masculinidad para generar igualdad; otros, reaccionan en dirección opuesta y exacerban sus conductas machistas para reafirmar su masculinidad hegemónica. Gary Barker, director de Equimundo, Centro para las Masculinidades y la Justicia Social, hace notar que, también hay varones con incertidumbre y “temor” al ser cuestionados si se posicionan en favor de los derechos de las mujeres y la equidad de género.
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El cambio en los roles tradicionales de género provoca que algunos varones vean transgredida su masculinidad al no poder responder a los mandatos para reafirmarse como hombres, un ejemplo, es el rol de proveedor único de la familia. Las nuevas generaciones saben que existen estereotipos insostenibles de la masculinidad; sin embargo, en el siglo XXI aún hay jóvenes que muestran rechazo a la igualdad de género.
“No hemos creado un mapa que hable de las masculinidades nuevas o positivas”. Gary Barker hace notar la importancia de visibilizar y fomentar, desde edades muy tempranas, identidades distintas a la tradicional… hombres que construyan igualdad con sus actitudes cotidianas.
Aunque han surgido grupos de hombres con posiciones radicales ante la igualdad de género, también es notoria la existencia de otros con interés “de construir un mundo mejor” a partir de las relaciones de género. A ellos se les conoce como “aliados”, pero Gary Barker sugiere ir más allá y posicionarnos como “cómplices”.
“La masculinidad tradicional es nociva para la salud”, porque impide el cuidado de la salud física y emocional; limita las expresiones de afecto y la empatía con distintas formas de vida de las personas; y porque utiliza la violencia en diversos grados y formas dentro de las relaciones interpersonales de los hombres. Esta forma de vivir la masculinidad tiene elevados costos en la salud de los hombres e, incluso, como lo muestra el estudio La Caja de la Masculinidad, también tiene costos económicos para los países. El machismo le cuesta a México 1,400 millones de dólares al año. Por el contrario, la igualdad dentro y fuera del hogar tiene beneficios sociales, económicos y personales en la vida de todas las personas -entre ellos- mejor convivencia familiar, oportunidades de desarrollo profesional, mejora del ingreso económico en el ámbito familiar, y relaciones más gozosas de pareja… y más beneficios. Gary Barker dice que existe mucho trabajo por hacer en el tema de la igualdad de género, pero podemos comenzar por visibilizar nuestro interés por generar un mundo igualitario, actuar, y convertirnos en cómplices de las mujeres para construir un mundo mejor.
Ve completa la conferencia virtual “Nuevas masculinidades: el rol de los hombres en la igualdad de género”, realizada por ONU Mujeres, América Latina y el Caribe. Diciembre de 2022:
