¿Cómo nos relacionamos los hombres en el cuidado de nuestro entorno y de la naturaleza?
Uno de los mandatos de la masculinidad señala que los hombres debemos ser exitosos, y en un sistema capitalista como en el que vivimos el éxito se muestra con el consumo. Por eso se vuelve necesario reflexionar sobre nuestra identidad masculina y nuestras prácticas de cuidado con el entorno donde vivimos.
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Sin naturaleza, no es posible la vida humana: los hombres también debemos estar en la lucha ambiental.
En los años 70, después del movimiento hippie de una década anterior, las mujeres feministas comenzaron a cuestionar y hacer investigación sobre la insostenibilidad del capitalismo y el abuso en el uso de recursos naturales. Una de las principales preguntas fue: ¿hasta dónde es el límite de crecimiento con la manera en que explotamos a la naturaleza? En esa década distintas pensadoras comenzaron un movimiento ambientalista, entre ellas, Françoise d’Eaubonne, ella acuñó el término “ecofeminismo”. Karla Priego Martínez, Antropóloga Social especialista en género, medioambiente y cambio climático, dice que a partir de esa década se desarrollaron investigaciones y activismos con perspectiva de género y medio ambiente.
“¿Qué tiene que ver el ecofeminismo con la cultura de paz?”. La maestra Priego señala que en la década posterior al surgimiento de el ecofeminismo este se diversificó y se desarrollaron propuestas comunitarias, donde la naturaleza es fundamental para la convivencia humana. En los 80 surge el Movimiento Chipko, en la India, encabezado por Vandana Shiva y comienza a hablarse de “aprovechamiento forestal sustentable”.
“Los países del sur global tienen una manera distinta de concebir a la naturaleza en comparación con el norte global”. Por ejemplo, en Latinoamérica el ecofeminismo ha sido acogido por mujeres de pueblos originarios, para señalar la importancia del cuidado de la naturaleza para vivir en paz y continuar con la vida.
“El futuro debe ser sin armamento y con un cuestionamiento al sistema capitalista y consumista”. Existen hombres que se han unido a esta idea de Petra Kelly, y a los movimientos ambientalistas de las mujeres. La Dra. Priego dice que los hombres sí tienen cabida en el ecofeminismo cuando lo hacen fuera de las relaciones de poder.
¿Cómo nos relacionamos los hombres en el cuidado de nuestro entorno y de la naturaleza?
Uno de los mandatos de la masculinidad señala que los hombres debemos ser exitosos, y en un sistema capitalista como en el que vivimos el éxito se muestra con el consumo. Por eso se vuelve necesario reflexionar sobre nuestra identidad masculina y nuestras prácticas de cuidado con el entorno donde vivimos. En México no existe un movimiento de hombres ambientalistas, pero sí existen activistas que defienden el territorio y los recursos naturales presentes en sus comunidades. Algunos de ellos incluso han sido asesinados por oponerse al extractivismo de empresas nacionales y transnacionales. El cuidado del medio ambiente enfrenta grandes retos relacionados con los hábitos de vida de los humanos, por eso el ecofeminismo propone replantear nuestra manera de consumir, estar dispuestos a cuidar lo que nos da vida, porque sin recursos naturales no hay paz, ni futuro.
Ve completa la conferencia “Los Ecofeminismos: paz y resiliencia, un recuento de narrativas y luchas”. Realizada por la Coordinación de Gestión Educativa parar una Cultura de Paz, de la Universidad Autonómica de Querétaro. Mayo de 2023.
