Buen trato es la escucha, el respeto y los afectos en familia.
El buen trato ha permitido a los miembros de las familias diversas tener calidad de vida en estos meses de cuarentena. Pero el buen trato no es algo que surja espontáneamente, es una actitud que se construye a partir de la voluntad de cambiar los esquemas rígidos de convivencia y los estereotipos de masculinidad.
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La argentina Beatríz Schmukler, doctora en Sociología, observa que en 2020 “las creencias de género y sobre la familia única se comienzan a desmitificar con mayor visibilidad”, por eso la campaña Hombres en Sana Convivencia, impulsada por Cómplices por la Igualdad, “llega en un momento histórico” para seguir dialogando sobre las relaciones entre las personas, fuera y dentro del hogar.
Sí, poco a poco el cuestionamiento de los hombres sobre los mandatos de género es más visible, las resistencias también pero, por ejemplo, en España cada vez hay más rincones donde los hombres trabajan su masculinidad, dice Erick Pescador, sociólogo especialista en masculinidades. Él invita a cambiar, a ser un hombre bien tratante a partir del “extrañamiento” hacia los mandatos que no me permiten ser un mejor hombre para mí y para quienes me rodean.
“Si tu masculinidad es afectiva seguramente tu entorno se transforma”. Para Erick Pescador es completamente visible la manera en que los malestares asociados a los estereotipos de masculinidad disminuyen cuando los hombres no vivimos bajo esas lógicas de género. Sucede lo mismo con la paternidad. Por eso mostrar públicamente las posibilidades de vivir una masculinidad positiva adquiere importancia en la construcción de identidades sanas, pacíficas e igualitarias.
En 2020 también es visible que las generaciones más jóvenes son más conscientes de la diversidad de identidades genéricas y también de la diversidad que existe en las familias. Karen López de la Red Nacional de Adolescentes, ronda los 15 años y sabe que los estereotipos de género no hacen más que limitar el desarrollo de las personas, ella está segura que los cambios en las identidades y en las relaciones de las personas “empiezan por uno mismo”.
“No es culpa de los hombres de hoy lo que han hecho los de siempre, pero sí es su responsabilidad descubrir cómo pueden ser mejores hombres para ellos y para los suyos”, para Erick Pescador está claro que el machismo es un tipo de masculinidad que “no es sostenible”, porque no es saludable para el hombre macho ni para quienes lo rodean, incluso, cada vez será más difícil para ellos encontrar pareja porque, como bien señala Karen, ellas ya ponen más atención en el buen trato que trae beneficios a la convivencia con las personas con quienes nos relacionamos y también a nuestra salud mental. La escucha y el respeto son necesarios en sociedades en las que cada vez son más diversas las configuraciones familiares y las identidades de género de las personas. Es por esto que el buen trato puede, incluso, ser una filosofía de vida fuera y dentro de nuestro hogar, en la construcción social que emprendamos a partir de esta contingencia sanitaria.
La sesión virtual “Hombres por la corresponsabilidad y buen trato en las familias” se realizó el 16 de junio de 2020:
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