La transición de la paternidad: hombres en diálogos diversos
Santiago Merlo es un padre trans y ha vivido su transición en el cuerpo, en su vida y también en sus deseos de ser padre. La primera vez que buscó vivir su paternidad se enfrentó a un sistema que no estaba preparado para reconocer que las personas trans sienten la paternidad como un deseo y se encontró con comentarios que le discriminaban o que le imposibilitaban para continuar con el proceso para convertirse en padre. -Definitivamente ni la sociedad ni las instituciones están preparadas para hablar sobre el tema-, comenta Santiango, entre los recuerdos que enumera mientras habla de su transición hacia la paternidad; Lola su primera hija, llegó a él y su esposa por medio de la adopción y confiesa que fue un bello reto que amplió su panorama de la vida, de las relaciones y de sus vínculos. Y cuando Santiago recuerda la primera vez que Lola le dijo papá, aún con la complejidad que eso implica para ella pues tiene parálisis cerebral, la voz se le quiebra, la piel se le enchina y sus ojos se llenan de alegría.
Patricia Piris y Darío Ibarra tienen la sensibilidad para abrir espacios de confianza incluso cuando desde la virtualidad los vemos en cualquier parte del mundo, sus charlas son profundas, honestas y muy sensibles a los temas que abordan desde la Red MenEngage América Latina. Cuando invitaron a Santiago para platicar y compartir su experiencia como padre trans, le preguntaron sobre el deseo y los procesos por los que atravesó en una sociedad que tiene tan remarcado el binomio hombre-mujer como posibilidades limitadas para vivirse.
Para su segundo hijo, Santiago comparte que buscaron, su esposa y él, llevar un tratamiento de fertilidad para poder embarazarse pero en el camino se encontraron con cuestionamientos que anteponían la genitalizacion de los trámites antes que intentar entender cuál era el motivo por el que buscaban ayuda para poder concretar su proyecto de familia planeado y deseado.
La familia es un pilar fundamental para la vida, comenta Santiago mientras recuerda a su padre como un referente para el tipo de padre que él quiere ser, pues comparte que desde pequeño vivió en un entorno que no estaba delimitado por los roles sino que complementaban las tareas del hogar a partir de las posibilidades que cada uno de los integrantes tenía en su día a día.
Mi espejo de paternidad fue mi propio padre, comenta Santiago, mientras recuerda con felicidad su infancia y sus referentes para hacer familia. También comenta que su transición a la paternidad no ha sido fácil, por cuestiones sociales, culturales e institucionales, pero al final esos pequeños pasos que ha dado junto con su esposa les han permitido concretar con el tiempo su proyecto de familia. Santiago es un hombre trans que le encanta hablar sobre su paternidad y no la idealiza ni mucho menos romantiza, sabe que no todo es perfecto, pero de lo que está seguro es de que su paternidad es deseada y junto con ella asume todo lo que esto implica como un padre pleno y como un adulto funcional; él confía en que mientras más se habla de estos temas más podemos socializarlos para sacarlos del tabú y enfocarnos en lo importante: convertirlos en un diálogo cotidiano que nos permita reconocernos en las diferencias y construir el mundo a partir de ellas.
**Consulta la presentación completa “Ser PADRE Trans” organizada por MenEngage América Latina y la Campaña de Paternidades MenCare.
