Los teléfonos inteligentes y las aplicaciones móviles transformaron las relaciones de los seres humanos.
A través del teléfono se conocen las últimas noticias del día, se mantiene contacto con viejos amigos, familiares lejanos y, también, se liga. Para muchos, puede parecer extraño que una persona se enamore o se sienta atraída por alguien que no conoce, sin embargo, en el siglo XXI las relaciones a través de la pantalla son comunes, incluso, para los jóvenes son normales. Gabriela Montoya Gastelum, doctorante en Ciencias Antropológicas, ha realizado investigaciones sobre las transformaciones en las afectividades juveniles en la era digital. Ella señala que, reflejo de esas transformaciones, es la diversidad existente de apps.
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Las nuevas generaciones están inmersas en la tecnología y muchos adultos están convencidos de que esos jóvenes se encuentran abstraídos de la realidad. Pero esa visión, que podríamos llamar adultocentrica, no tiene en cuenta que lo digital forma parte de la realidad. Durante su investigación, la maestra Montoya conoció chavos reflexivos sobre las maneras en que se mantienen relaciones en la actualidad.
Tinder, Bumblee, Grinder, Facebook Parejas… hoy existen muchas y distintas apps de citas. Algunas de ellas especializadas en preferencias sexuales e incluso, “fetiches”. Sin embargo, las relaciones en el mundo físico y el mundo digital no son iguales. Esto provoca “desfases” y conflicto en los usuarios de estas apps.
La especialización de las apps de citas permite que esos espacios se vuelvan habitables y apreciados por las personas. En esa virtualidad pueden llegar a sentir confianza y seguridad, a pesar de interactuar con personas desconocidas. Así lo expresó una de las entrevistadas de la maestra Montoya:
“Ay… vestida”
“¿Tú qué haces aquí?”
“Este lugar es para puros machos”.
Estas muestras de rechazó las recibió una chica trans entrevistada por la maestra Montoya cuando abrió una cuenta en Hornet, una aplicación de citas y encuentros sexuales para hombres gay donde no hace falta hacer “match” para poder interactuar con los otros usuarios. La maestra Montoya dice que en apps como ésta se expresan “masculinidades hegemónicas homosexuales”, en las que están presentes el poder, la violencia y la discriminación. Muchos usuarios de apps de citas experimentan situaciones similares, por eso optan por dejar de utilizarlas, aunque después de algún tiempo, muchos regresan. Estas apps “ganan cada vez más terreno” en las preferencias de los jóvenes para relacionarse con otras personas y cada uno las utiliza con distintos fines: para conversar, para tener encuentros sexuales o para encontrar pareja. La maestra Montoya asegura que las aplicaciones de informática para dispositivos móviles, en este caso las apps de citas, seguirán siendo importantes para los jóvenes en la manera de relacionarse con otras y otros, para construir “su afectividad e intimidad mediada por la pantalla”. Esta dicho: lo digital forma parte de la realidad y ahora es apremiante realizar análisis críticos de la expansión de estas apps que, obviamente, abren nuevos campos de estudio en el tema de la masculinidad en el siglo XXI.
Ve completa la conferencia “Etnografía Digital de las Afectividades Digitales Juveniles”, organizada por la Asociación Mexicana de Investigadores de la Comunicación A.C. Diciembre de 2021.
