Happycracia: mostrarse positivo y feliz… siempre.
A todos nos pasa: cuando abres Facebook, Instagram o whatsapp, lees frases motivacionales y ves selfies sonrientes de tus contactos, siempre sonrientes, un día sí y al siguiente también, aunque esa sonrisa a veces no parezca tan natural. Está claro que mostrarse feliz y positivo siempre tendrá más likes, a diferencia de expresar emociones que consideramos “negativas”, como la tristeza y el enojo. Zenia Yébenes, doctora en Filosofía y doctora en Ciencias Antropológicas, define la happycracia como una “dictadura de la felicidad”, que, en lugar de mejorar la salud emocional de las personas, las puede volver ansiosas.
Escucha el podcast (duración 10 mins):
Las redes sociales influyen de manera importante en los deseos y comportamientos de las personas, sobre todo de las más jóvenes. Ahí se refuerzan estereotipos de masculinidad y se llegan a delimitar las emociones que uno puede mostrar y las que no. Para la doctora Yébenes, existe una especie de “programación”, que impide relacionarnos con el sufrimiento, negarlo, y eso puede ser problemático.
En sus investigaciones, la doctora Zenia encontró programas en los que autoridades estadounidenses, a través de la psicología positiva, enseñan a sus soldados a ser resilientes a los actos que comenten cuando están en misión. Es decir, superar cualquier conflicto emocional que pueda surgir de las violencias que cometen. Ella apunta que la resiliencia, igual que la felicidad, son conceptos sobre los que debemos reflexionar más, para no entenderlos únicamente desde un aspecto individualista.
En el siglo XXI se incrementó el número de personas con depresión, ansiedad y estrés. Por eso, organizaciones internacionales como la ONU promueven la salud mental con acciones como el Día Internacional de la Felicidad. Instituciones y empresas también se unen a esas acciones, pero en muchos casos, con fines mercantilistas.
La felicidad es compleja de definir y para cada persona significa algo particular. Sin embargo, en las primeras décadas del siglo XXI, surgen corrientes psicológicas, “pseudocientíficas”, en palabras de la doctora Yébenes, que se enfocan únicamente en lo considerado “emociones positivas” y dejan de lado otras emociones como la tristeza o el dolor. Los sentimientos que normalmente llamamos negativos, son parte de la experiencia vital de los seres humanos. Vivir momentos de dolor y procesos de duelo, provocan reflexión, después calma que posibilita felicidad. Este proceso forma parte de la resiliencia, una capacidad humana que no niega el dolor, sino lo transforma. Los participantes de esta charla virtual, muestran incertidumbre y se preguntan: ¿cómo serán las personas del futuro donde la dictadura de la felicidad esté totalmente instalada? La doctora Yébenes dice que no tiene la respuesta; sin embargo, es posible imaginarlo si se observa la manera en que las redes sociales moldean la individualidad y la subjetividad de las personas. La invitación es a reflexionar sobre cómo nos relacionamos con todas nuestras emociones para lograr bienestar. La felicidad no es algo que se pueda comprar, pero sí es un estado que está más a nuestro alcance cuando generamos relaciones bientratantes con nosotros mismos, y con las personas y los entornos donde nos desarrollamos.
Ve completo el Neurotalk “Narrativas del bienestar emocional, dictadura de la felicidad e intersubjetividad”. Realizado por el Diplomado de Neurociencia, Arte y Cultura de la UNAM. Enero de 2022.