La violencia en tiempos del Covid-19
Suenan los ladridos de Mastropiero, fiel acompañante de José Alfredo Cruz Lugo que como cada semana convoca a una charla íntima con personas de Latinoamérica para hablar sobre el Covid-19 y su impacto en las relaciones interpersonales. Esta vez la cita cibernética es con dos hombres, uno en Montevideo, Fernando Mendoza y Luciano Fabri en Argentina. Triada de latinoamericanos que coinciden en que lo personal es político y que las condiciones de cada país detonan ciertos problemas que ya son evidentes. Por ejemplo, ante el cambio de régimen Luciano, también conocido como Lucho por los cuates, considera pertinente reflexionar sobre las condiciones en las que quedó su país a la salida de Macri y comparte los efectos de lo que él llama la política criminal en el sector salud.
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Fernando Mendoza comparte los efectos sociales del Covid-19 en su país, Uruguay, que no rebaza los tres millones y medio de personas, la mayoría concentrada en Montevideo, ciudad que posee dimensiones parecidas a las de Querétaro en México; él reconoce que el coronavirus es un tema importante que está en el foco de atención pero hoy en día hay uno que le preocupa un poco más: la violencia.
Uruguay, México y Argentina comparten varias preocupaciones: la atención médica, la crisis económica y la violencia en los hogares que se ha incrementado durante la contingencia por Covid-19. Lucho aprovecha para comentar que a propósito de la violencia en los hogares, todos los argentinos estaban convocados a las seis de la tarde para una ruidada, el objetivo: salir a los balcones con ollas y sartenes para protestar contra la violencia que se detonó durante las primeras semanas de confinamiento. Pero ¿por qué se incrementó la violencia en los hogares?
Como dice Lucho estamos en un contexto muy particular y los recursos en situación de crisis tienen que adaptarse a estos tiempos para contener a los hombres y trabajar con ellos. Fernando Mendoza habla desde su experiencia de trabajo con hombres en Uruguay y considera que la contingencia marca ya nuevas rutas para replantear el trabajo con hombres en áreas de atención urgente.
La pandemia por covid-19 vino a destapar grietas en las construcciones sociales, los contextos políticos de cada región y por supuesto en el trabajo con hombres. Hoy los procesos históricos dejan ver sus efectos en la sociedad, en cómo se afronta esta crisis. La violencia se ha incrementado en estas tres partes del mundo: Argentina, México y Uruguay lugares en los que la salud es un tema complejo y preocupante. Los tres participantes en este encuentro virtual coincidieron en que es momento de cambiar la estrategia de trabajo con hombres porque la circunstancia lo amerita; preocupa su violencia, pero también su salud física y emocional. Ante la pandemia, José Alfredo, Francisco y Luciano afirman que es momento de prepararse para lo que viene: la crisis post-encierro que vivirá la comunidad mundial. Reconocen que este tiempo permite generar planes para atender los problemas que se presenten en el futuro, por su puesto, sin descuidar los del presente. Se acaba el tiempo de la charla, estos tres hombres saben que necesitan volver a la acción; mientras Lucio se prepara para la ruidada, Fernando se prepara para el trabajo en el futuro cercano y José Alfredo, tan inquieto como siempre, ya prepara las próximas charlas que conectan a otros hombres que viven en movimiento por toda Latinoamérica.
Agradecemos a José Alfredo Cruz Lugo y a Círculo Abierto al Aire el material que comparte con nosotros: Diálogos por Latinoamérica, un ejemplo de que en la crisis los medios pueden unirse y mostrar otras perspectivas del acontecer mundial. Si deseas escuchar el material completo busca las sesiones en el Facebook de Círculo abierto Al aire; si deseas consultar nuestros materiales búscanos en nuestras redes sociales.
