La doctora Guitté Hartog dice que el arte debe servir para generar cambios en todos los niveles, en la sociedad, en la comunidad, en las escuelas, las familias y las personas, porque como dice un proverbio maya:
El que cree crea;
El que crea hace;
El que hace se transforma así mismo
Y a la sociedad en la que vive.
Escucha el podcast:
“Hay una grieta en todo, así es como entra la luz”.
Esta frase del músico y poeta Leonard Cohen la utiliza la doctora Guitté Hartog para hablar de las emociones y su expresión como uno medio para transformar la “masculinidad tóxica”, para romper la armadura violenta en la que viven encerrados muchos hombres. El arte es un vehículo de expresión por el que se pueden sublimar y descargar las emociones, incluso, las que son negativas. El 1er simposio Internacional de Arte y Masculinidades, tuvo el objetivo de mostrar las posibilidades del arte para promover y generar masculinidades diversas a la hegemónica.
La doctora Hartog se presenta a sí misma como una mamífera buena onda y una mariposa valiente. En sus pinturas hay animales que conviven armónicamente, también humanos que se complementan, con cuerpos fusionados. Los colores azules, verdes y naranjas transmiten paz y felicidad. Ella asegura que el arte relacionado con la masculinidad puede ” abrir nuevos caminos… buscar escapes a los esquemas pesados”.
A lo largo de su vida como activista feminista, la doctora Hartog ha observado las cualidades de transformación que tiene el arte en jóvenes y adultos. Los efectos sobre la niñez son más visibles porque para los niños es más fácil aprender aspectos positivos de la masculinidad a esa edad. En los talleres de arte-terapia que ella tiene con niñas y niños están presentes la pedagogía de la vulnerabilidad y la pedagogía de la ternura.
En las primeras décadas del siglo XXI se escucha a investigadores y activistas contar que ellos tratan de educar a sus hijas e hijos fuera de los moldes machistas; sin embargo, los pequeños siguen reproduciendo algunas de esas actitudes machistas. Por eso, la doctora Hartog subraya que “existe una responsabilidad colectiva de criar hombres diferentes, para crear un mundo diferente”.
La doctora Guitté Hartog está segura de que el arte también puede resignificar palabras y conceptos, por ejemplo, el de revolución. Revolución significa cambio profundo, h normalmente está asociado a conflictos armados y actos violentos. Ella recuerda un mural en un museo sobre revoluciones, en él se aprecia en el a un varón desnudo, el centro de la composición son sus genitales y alrededor de esta figura humana hay escenas de lucha y violencia. El arte es hecho por humanos, y los humanos tenemos interiorizadas ideas estereotipadas sobre la guerra, la paz, la feminidad, la masculinidad, las relaciones de género… pero el arte puede servir como medio para cuestionar todas esas ideas. Y como dice Guitté Hartog: el arte debe servir para generar cambios en todos los niveles, en la sociedad, en la comunidad, en las escuelas, las familias y las personas, porque como dice un proverbio maya:
El que cree crea;
El que crea hace;
El que hace se transforma así mismo
Y a la sociedad en la que vive.
Escucha completa la conferencia virtual de la doctora Guitté Hartog durante el 1er Simposio de Arte y Masculinidades. Desacatos y resistencias: en busca de otros modelos de masculinidad. Octubre, 2021.
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