“El trabajo con hombres migrantes es una demanda de las mujeres que viajan con ellos”.
Desde hace más de 4 años, Venezuela experimenta una de las mayores emigraciones de su historia. Mujeres y hombres salen de ese país por motivos políticos y económicos hacia otros países latinoamericanos o hacia Estados Unidos. Christian Guzmán, psicólogo social clínico y miembro del proyecto Fronteras sin Limites, señala que 4 millones de migrantes han salido de Venezuela y 1 millón 200 mil han llegado y permanecido en Perú. El programa Fronteras sin Límites tiene el objetivo de dar atención a las mujeres migrantes, y en años recientes han incluido la atención con perspectiva de masculinidades a hombres migrantes.
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Perú se ha convertido en un país de acogida para migrantes venezolanos. Muchos de ellos son hombres que viajan para mejorar sus condiciones económicas y cumplir de mejor manera su papel de proveedor. El proceso de salir de su país y vivir condiciones de precariedad y violencia provocan que estos hombres requieran apoyo a su salud mental.
Proveer es una de las “principales insignias de la masculinidad”. También lo es tomar riesgos para mostrarse valiente. Por eso migrar para los hombres representa un reto a su masculinidad, aunque en el trayecto se pueda perder ese “capital de masculinidad” o, estatus de hombre hegemónico, debido a las vulnerabilidades que se viven en el trayecto.
En Fronteras Invisibles han generado una perspectiva que atiende a los migrantes a partir de sus necesidades, pero también, aprovechan sus fortalezas y capacidades para generar reflexiones sobre su masculinidad, cambios en la manera que ejercen el autocuidado y para volverlos “actores clave en la prevención de la violencia de género”.
Los migrantes no son criminales. Sin embargo, en las primeras décadas del siglo XXI está muy presente un discurso político que los clasifica como personas dañinas para el país que los recibe. El trabajo del programa Fronteras Invisibles se enfoca en cambiar esa percepción de los migrantes para, posteriormente, realizar un trabajo de integración a partir de la concepción que ellos mismos tienen de su condición migrante, su situación económica e, incluso, su masculinidad. El trabajo con hombres migrantes es una experiencia que se comienza a replicar en distintos países del mundo. En esta serie radiofónica hemos escuchado los casos de países como España, México, y ahora Perú. Lugares donde se aprovechan los espacios de socialización de los hombres para provocar la reflexión sobre temas de masculinidad con una perspectiva que les invita a cuidar su salud física y emocional, y así tener la posibilidad de una mejor integración con la sociedad que los recibe.
Ve completa la conferencia “Crisis de las masculinidades en contextos migratorios”, realizada por Masculinidades por la Igualdad, Piura, dentro de la IX Conferencia Internacional de Masculinidades y Migración. Junio de 2022:
