Primero fueron palabras de menosprecio, luego los insultos y después pellizcos, empujones y golpes; ahora, cuando Esmeralda quiere terminar la relación, su novio le manda mensajes: “si me dejas, me voy a quitar la vida”, “no sé lo que haré, dañaré a tu familia”. Gerardo ha compartido su vida con Esmeralda por más de 5 años, ahora no sabe como lidiar con la separación, el apego que tiene hacia ella lo volvió agresivo; meses antes no pasaba día sin revisarle el teléfono a ella y de prohibirle reunirse con sus amigos; ahora, cuando ella quiere terminar, las amenazas y el chantaje emocional es constante y desgastante. Someterse a ese estrés y maltrato tiene consecuencias en la salud mental, pero también en el funcionamiento biológico del cerebro. La violencia y el apego en las parejas jóvenes tiene consecuencias en la salud emocional de las personas, y también, efectos fisiológicos en el cerebro.
Escucha el audio (duración 11 mins. 50 seg.)
“Si me dejas me voy a matar, no se lo que voy hacer sin ti”.
Esmeralda escuchó a Gerardo mientras trataba de soltarse de sus manos. Para ella su relación estaba estancada, ya no tenía sentido continuar. Para él, los insultos y maltratos constantes no eran razón suficiente para que ella ya no lo quisiera; así se llevaban, era algo normal en la relación, pensaba él. Tristeza, desvalorización, inseguridad y perdida de confianza fueron las emociones que Esmeralda vivió en esa relación, así se lo contó a Tania Olguín, cuando ella le pidió su testimonio para realizar su investigación sobre la violencia emocional en el noviazgo.
“Me cela porque me quiere”. El amor romántico suele enmascarar violencia sutil a pesar de los insultos y los golpes existentes en la relación, incluso, puede desencadenar en agresiones graves. “Sí, me siento amado por mi novia, aunque no como la primera vez”. Esto contó uno de los entrevistados por Alan de Jesús Moreno, cuando realizó su investigación sobre el apego en estudiantes universitarios .
Cuando una persona sufre maltrato constante tiene efectos graves en sus emociones, pero también en la estructura y evolución del cerebro, así lo reportan diversas investigaciones neurológicas. La plasticidad del cerebro es el principal tema de interés para Jorge Alberto Guzmán, doctor en Neurociencias, sobre todo cuando esta plasticidad se relaciona con el aprendizaje y desaprendizaje de los roles de género.
El funcionamiento del cuerpo humano relacionado con los comportamientos sociales de los hombres también es tema de interés para Ángel Omar Pérez. Él utilizó aparatos para medir la frecuencia cardiaca en 10 hombres y en 10 mujeres. Los hombres presentaron más palpitaciones debido a “los roles con los que históricamente han sido educados”.
Primero fueron palabras de menosprecio, luego los insultos y después pellizcos, empujones y golpes; ahora, cuando Esmeralda quiere terminar la relación, su novio le manda mensajes: “si me dejas, me voy a quitar la vida”, “no sé lo que haré, dañaré a tu familia”. Gerardo ha compartido su vida con Esmeralda por más de 5 años, ahora no sabe como lidiar con la separación, el apego que tiene hacia ella lo volvió agresivo; meses antes no pasaba día sin revisarle el teléfono a ella y de prohibirle reunirse con sus amigos; ahora, cuando ella quiere terminar, las amenazas y el chantaje emocional es constante y desgastante. Someterse a ese estrés y maltrato tiene consecuencias en la salud mental, pero también en el funcionamiento biológico del cerebro, por ejemplo, deficiencia en los circuitos cerebrales y deterioro neuronal. Para Jorge Alberto Guzmán, la plasticidad del cerebro revela algo que parece obvio, pero es necesario mencionar: el maltrato daña fisiológicamente al cerebro, así como el buen-trato lo beneficia considerablemente. Él, afirma que la plasticidad del cerebro de los hombres permite adaptar su funcionamiento a patrones menos violentos, claro, si esos hombres quieren hacerlo y -mejor aún- si desde el entorno social se fomentan esos comportamientos.
¿Tienes comentarios? Mándanos un mensaje de voz por Whatsapp: 55 12 33 29 15
También búscanos en Twitter como: @complicesdel21, y en Facebook y Youtube como cómplices del 21 / entrehombres1060.
